Siesta en Ubergate y apps en Nigeria para financiar un teléfono
Ya sea en el norte del planeta y sus olas de calor, como en el sur y la hierba escarchada por el frío, la lectura de hoy quiere ayudarte a pasar una buena costumbre: la siesta.
“Show me the money”
Un escandalete de 30 segundetes
Uber nunca cayó muy bien en Europa. Ya no digo a los taxistas. No cayó bien como modelo de negocio sin intermediarios ni licencias caras (de la misma manera que no simpatizan las criptomonedas a los bancos centrales). Así que era cuestión de tiempo que les cayera la del pulpo. Porque levanta ampollas la filtración de ciertas manipulaciones del mercado utilizando a políticos de la talla (LA talla, jaja) de Macron y a economistas que publicaron cientos de artículos a su favor.
Lo de los economistas era de prever. Escriben artículos hasta para recomendar la mantequilla si es necesario. Lo hacen los políticos también, pagando o teniendo muy en lo alto a todo aquel que valide sus programas electorales. No veo el escándalo en eso. Se les ve el plumero y tú deberías saber ya que no puedes creer en todo estudio de expertos que se publique como verdad absoluta. Incluso los más de 180k de documentos que tiene este escándalo, habría que liberarlos y que todos podamos acceder y sacar conclusiones.
Ahora, ya sabemos, culpas al ex CEO, que se arregle Macron como pueda y sigues trabajando en USA tan pichi, mientras te apañen los inversionistas.
Psicodélicos 30 segundos
Hay valiosas lecciones en la tienda de ropas que tuvieron los Beatles. Su primera aventura comercial fallida. Cómo músicos, únicos y talentosos. Como comerciantes no parecían ni ingleses. Con una inversión de lo que les sobraba en la cúspide de sus carreras, abrieron en 1967 una tienda de ropas muy sixties en 3 edificios que habían comprado y cuya fachada cubrió de motivos psicodélicos el grupo The Fool.
Varios problemas (que muchos emprendedores ya conocemos y sufrimos): había muchos “jefes”, la ropa era horrible, la gente llenaba el local sólo por curiosidad y no compraba nada, el stock pasaba de moda, los robos no tenían control.
Cuando acumuló una deuda de unas 200 mil libras, en julio de 1968, decidieron cerrar. Y regalar todo, todo. Hubo filas de personas que sólo fueron al saqueo fetichista. Y hasta una demanda, una década más tarde, contra Steve Jobs porque… la tienda se llamó APPLE.
Finánciame 40 segundos
Un estudiante en Nigeria necesita una PC nueva y no puede esperar a ahorrar.
Cosas de los países con inflación.
Así que utiliza la App CDcare, una de las tantas empresas que desembarcó en el país, para comprar a plazos. Al final, la computadora le saldrá más cara que si hubiera comprado con un solo pago. Pero eso es el coste de la oportunidad. Ahora o nunca.
Son créditos al consumo: desde teléfonos a motocicletas. Que la población utiliza para ganarse el pan o estudiar (o transportar). Cuando la mitad de la población (unos 100 MILLONES de habitantes) no tienen ni siquiera identificación.
¿Qué vieron las empresas para volcarse al crédito para el consumo minorista? Que el mercado en Nigeria gasta 1.4 mil millones de dólares al año. Y si una PC se cobra al triple por darla a plazos… hay que ponerle un nombre más hostil al negocio.
Para la guinda: todas esas apps son prestamistas. Y comparten la información sobre morosidad. Endeudado y registrado, pero con la PC para estudiar.
Ahora:
Cuidado con la contaminación cruzada.
No sale aún en las noticias, pero todo mi entorno y el entorno online tiene casos de gastroenteritis. Demasiado calor, incluso en Asturias.
Cocina bien todo, a la sombra.
¡Buena siesta! La costumbre de Edison, además de copiar a Tesla.
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No tendremos nada y seremos felices.
Corrección, sólo tendremos deudas